Sin «Petróleo Plus», vuelven los fantasmas al golfo San Jorge

Por: Raúl Figueroa

«Estamos en un panorama similar al que motivó en su momento la creación de la resolución 312» -pago de sueldos básicos para operarios de equipos paralizados-, se sinceró una fuente del ámbito gubernamental de Chubut durante la última semana, al evaluar el impacto que significa para la provincia de Chubut la suspensión del programa Petróleo Plus, que afecta especialmente a operadoras del golfo San Jorge. En las últimas horas, el gobierno de Martín Buzzi habría iniciado una mediación ante la Secretaría de Energía de la Nación para intentar atenuar el impacto de aquella decisión, o bien para plantear la necesidad de que se determinen mecanismos alternativos.
El programa Petróleo Plus establecía precios diferenciales para el volumen de crudo que significara un incremeto respecto de la producción registrada hasta el primer semestre del año 2008. Así, por cada metro cúbico que superara aquel registro, la operadora recibía un precio más elevado que el establecido para el mercado interno.
Dicho sistema fue creado por el gobierno nacional, con el propósito de establecer incentivos a los incrementos de producción. En la práctica, la mejora de precios se lograba mediante certificados de descuentos sobre las retenciones a la hora de exportar: en definitiva, el sistema implicaba un mayor beneficio para las operadoras que exportan mayor volumen de crudo.
En los hechos, esto significó que fuera Pan American Energy la principal operadora beneficiada por el sistema, por ser la que mayor producción de petróleo exporta al mercado internacional (el 80 por ciento del crudo exportado sale de áreas de Chubut), seguida por Sinopec (que centraliza operaciones en Santa Cruz). Otras operadoras, con menores volúmenes de exportación -YPF vuelca casi toda su producción al mercado interno- tienen la opción de vender los certificados a las operadoras que sí exportan.
Al suspenderse el programa de incentivos, las operadoras se encuentran ante una grave disyuntiva: en tanto el petróleo exportable es el excedente que no se utiliza en las refinerías instaladas en el país, al recibir un precio similar al del mercado interno (que para el caso del tipo Escalante se ubica en torno a los 66 dólares) pierde rentabilidad. Es que por el volumen de petróleo exportado, las operadoras deben pagar regalías sobre la base del precio internacional (que se ubica por encima de los 100 dólares), con lo cual el descuento aplicado por cada barril de crudo lo lleva a una cotización de alrededor de 30 dólares. Con Petróleo Plus, en cambio, la cotización podía llegar a ubicarse en torno a los 60 ó 65 dólares por barril.
Cuando en el gobierno provincial reconocen que el panorama es complejo, saben de qué se trata: cuando refieren que el contexto de hoy es similar al que dio lugar a la resolución 312, la memoria remite a la crisis de 2008 y principios de 2009, cuando mediante aquel mecanismo se creó un fondo para pagar sueldos a los operarios petroleros que no tenían trabajo, debido a la drástica reducción de equipos.
Si bien días pasados PAE ratificó el plan de inversiones para el año 2012 y proyectó la realización de alrededor de 220 pozos para este período, manteniendo el ritmo de actividad de los últimos años, las dudas se plantean a partir de la decisión del gobierno nacional de dejar sin efecto aquel sistema de incentivos.
Es que las operadoras podrían rever sus planes de inversión, en función de este nuevo contexto. Según publicó diario Perfil, citando fuentes de una compañía que opera en el golfo San Jorge: «La ecuación económica perdió sentido. Con este esquema, no es conveniente seguir perforando porque los números no cierran».
La misma publicación citó a altas fuentes gubernamentales, aunque sin identificarlas: «Las operadoras ya nos avisaron que si el programa no se reanuda, reducirán la explotación de los pozos y frenarán la inversión. No exportarán a pérdida», habría confiado un colaborador del gobernador Buzzi al citado medio.
Los problemas en la zona ya se vienen vislumbrando. De hecho la detención de tres equipos perforadores por parte de YPF requirió un acuerdo en la Subsecretaría de Trabajo, para el sostenimiento de los salarios a los operarios afectados a esos equipos, según confió una fuente gubernamental a diario Crónica de Comodoro Rivadavia.
Pero los inconvenientes podrían multiplicarse si se siguen paralizando equipos. Según advirtió recientemente el CEO de PAE -Oscar Prieto-, la eliminación de las compensaciones parciales que implicaban el programa Petróleo Plus retrotrae a una situación peor a la que regía en 2007, cuando se aplicó el régimen de retenciones móviles. Es que desde entonces hasta ahora, según detalló el mismo ejecutivo, el costo de perforación se incrementó en dólares a más del doble por pozo, mientras la mano de obra se incrementó en un 151 por ciento; y el costo de los equipos de perforación, subió en un 195 por ciento.
En ese marco, adquiere relevancia la alternativa adelantada a este diario por el ministro de Hidrocarburos, Ezequiel Cufré, cuando afirmó que una de las posibilidades que se evaluó junto al Ministerio de Planificación y la Secretaría de Energía es la vuelta a un sistema de retenciones más atenuado.
En efecto, en el gobierno nacional se estaría evaluando la opción de volver a aplicar la resolución 535, que fijaba un piso de 25 por ciento de retenciones y a partir de allí un esquema flotante, que se incrementa según crece la cotización internacional del barril de crudo.Dicho sistema había sido creado durante la gestión en el Ministerio de Economía de Roberto Lavagna.
El tema podría ser tratado en la próxima reunión entre los gobernadores de la OFEPHI y el gobierno nacional, en una agenda que postula al gobernador Buzzi como referente en la búsqueda de nuevas metas de producción, tendientes a revertir el déficit energético que sufre el país.