Durante el Seminario “Comodoro Renovable”, la Dra. Laura Giumelli expuso en una de sus presentaciones la temática vinculada a la tarifa necesaria para que resulten viables los parques eólicos en la República Argentina. En esta entrevista con Desarrollo, la especialista afirma que el precio requerido actualmente es del orden de los 122 dólares por Megavatio hora entregado, al tiempo que advirtió sobre la necesidad de que se proyecte a la generación eólica desde la perspectiva industrial que implicaría una política de Estado que, al igual que lo realizado en Brasil, contemple la incorporación de fabricantes nacionales de los equipos, como complemento para proyectos que hoy priorizan la compra de molinos totalmente importados desde el exterior del país.
La doctora Giumelli es consultora independiente y se desempeña en diversas provincias, con una experiencia de más de 10 años como asesora técnica en el Congreso de la Nación, para temas de energía desde su especialidad en regulaciones.
“Lo que hice fue un ejercicio para comparar todas las diferentes tecnologías disponibles en el país, o potencialmente disponibles –explica-, tomando un plazo de repago de 5 años, para todas por igual; en ese modelo, el resultado obtenido muestra que para la generación eólica se necesita una tarifa de 121 ó 122 dólares por megavatio hora entregado, esto considerando un recupero de las inversiones que haga posible que los privados inviertan y no deban posponer la amortización en forma prolongada en el tiempo. Ese valor equivale a una máquina muy eficiente de gas o de ciclo combinado, con un precio de gas en boca de pozo del orden de los 8 dólares por Millón de BTU”, compara en su análisis.
Según surge del análisis de la especialista, los parques eólicos del país requieren una tarifa como la mencionada para resultar viables económicamente, al tiempo que en su comparación sostiene que el precio requerido no difiere de lo que hoy se reconoce para la generación térmica, cuando ésta es abastecida por gas importado (en torno a los 8 ó 10 dólares por Millón de BTU si llega desde Bolivia, o en el orden de los 16 a 18 dólares si llega en estado líquido, transportado por barco, desde otros países).
La consultora asegura que ese nivel de tarifa es el que se está reconociendo actualmente para los nuevos proyectos, enmarcados en programas como el GENREN (Generación de Energías Renovables), si bien han quedado fuera de ese alcance otros emprendimientos anteriores, tales como el de la SCPL de Comodoro Rivadavia (cuya generación de energía eléctrica recibe hoy una tarifa muy inferior a la establecida como necesaria para dar viabilidad a los parques).
“Creo que el Programa GENREN y la Resolución 108 de la Secretaría de Energía de la Nación son dos grandes modelos para incorporar energía limpia a la matriz energética nacional”, enfatiza la especialista.
En efecto, la mencionada normativa del organismo nacional contempla la posibilidad de autorizar nuevos proyectos de generación de energía eólica, con el reconocimiento de una tarifa de122 dólares Mw/h, a fin de hacer viables nuevos emprendimientos, dependiendo de la capacidad tecnológica de los mismos.
Consumidores pueden generar
La disertante también ha enfocado el tema desde la visión de los consumidores de energía, quienes en función de los nuevos marcos conceptuales, también pueden transformarse en generadores. En efecto, a partir de nuevas tecnologías como paneles fotovoltaicos u otros sistemas, los usuarios y consumidores tienen derecho a generar su propia energía y, eventualmente, a vender sus excedentes a la red. Esto sería paralelo al avance del establecimiento de precios proporcionales a los costos de generación, sin subsidios, con lo cual esos valores apuntarán a generar consumos más eficientes y a evaluar, en determinados casos, la posibilidad de resolver el consumo de energía a través de sistemas de generación propios.
Demanda industrial
Giumelli entiende que al establecerse una tarifa acorde para la viabilidad económica de los parques eólicos, otra condición para favorecer el desarrollo del sector está dada por el eje de integración tecnológico a nivel nacional o regional.
“La integración de tecnología nacional es perfectamente posible –asegura- y Comodoro Rivadavia también es pionera en esto, porque tiene un polo de desarrollo eólico con empresas de la región y es muy importante; más allá de la tecnología base que pueden ser los rotores de los generadores, tanto las palas como las torres y toda la tecnología asociada a mantenimiento puede ser perfectamente desarrollada a nivel nacional y lo bueno es apuntar a que crezca esa integración; la otra pata importante es poner las condiciones para ese desarrollo industrial, tanto como el de los propios parques”.
En ese plano, ante una consulta de si sería conveniente poner como condición para el desarrollo de parques (que hoy tienen financiamiento de fondos de la ANSES, por ejemplo) que se demande en forma paulatina la incorporación de equipos fabricados en el país, responde la especialista:
“Sí, cuando uno mira otros programas como el de Brasil observa que la integración nacional era una parte significativa del proyecto, porque de lo contrario los costos de logística son enormes y los termina pagando el usuario o consumidor, o bien los subsidia el Estado”.
Consultada por los anuncios de un nuevo parque eólico de gran capacidad de generación en la zona de Gastre, con equipos importados desde China, la especialista reflexiona: “hoy China vuelca una cantidad impresionante de potencia, semanalmente, al mercado internacional, con una importante economía de escala. Hay que tomar lo que uno a le sirve y apuntar a la integración de la industria local, porque además no tiene grandes complejidades y la Argentina está capacitada para hacerlo”.
