Con el objetivo de obtener recursos para volcar a la actividad petrolera, específicamente en Vaca Muerta, YPF puso en venta su sede central ubicada en Puerto Madero, una torre de 36 pisos de altura de moderno diseño, inaugurada en el año 2009 durante la gestión del grupo Eskenazi. Según trascendió en distintos ámbitos, la operadora apuntaría a recaudar alrededor de 400 millones de dólares.
La medida, que ya se conoce en distintos ámbitos de la compañía, tiene dos fundamentos. Una se relaciona con el perfil de austeridad y priorización de la actividad principal de la operadora, que es precisamente la producción de petróleo y gas, que le imprimió el CEO Sergio Affronti desde el inicio de su gestión.
De la mano de lo anterior, el trabajo virtual o el tele trabajo impuesto desde el inicio de la cuarentena a raíz de la pandemia, demostró que la mayor parte del trabajo que se concentraba en el edificio, de 8.500 metros cuadrados y 160 metros de altura, puede realizarse por vía remota, como quedó reflejado entre marzo y diciembre último. En la sede central se desempeñan alrededor de 3.000 personas, por lo que la compañía tiene otras instalaciones, como el histórico edificio de Roque Saenz Peña donde funcionó su sede hasta el traslado, aunque según se informó también se encontraría en venta. Por esa unidad, podría obtener entre 30 y 40 millones de dólares.
Recientemente, en el mes de noviembre, la compañía también había vendido otro de sus edificios, ubicado en la calle Tucumán 744, a manos de la empresa AySA, que hasta ese momento alquilaba las instalaciones. La operación se concretó en 30 millones de dólares, según informó El Cronista en aquella oportunidad.
Situación financiera compleja
El impacto de la pandemia sobre la industria petrolera del país se hizo sentir fuerte en el último año. Según informó la compañía al presentar su balance correspondiente al tercer trimestre de 2020, en noviembre último, las pérdidas acumuladas hasta ese momento eran de 1.637 millones de dólares, aunque la perspectiva para el último tramo del año tendía a mejorar, a partir de haberse reducido los márgenes negativos.
“La demanda de productos refinados se recuperó significativamente con respecto al trimestre anterior –informó la compañía en ese momento-, impulsada por el aumento del 41% en los volúmenes vendidos de nafta y 22% en diesel, aunque todavía no se alcanzaron los niveles pre-pandemia. Los precios en el surtidor se ajustaron dos veces durante el trimestre, acumulando en promedio un incremento del 8% en pesos. Sin embargo, medidos en dólares, los precios se contrajeron 25,3% y 19,8% interanual para gasoil y nafta, respectivamente”. Estos últimos indicadores explican las subas de precios de combustibles que comenzaron a activarse desde la última parte del año pasado y lo que seguirán escalando en las próximas semanas.
Sergio Affronti, nuevo presidente de la Red Argentina del Pacto Global
En otro orden, se informó que el actual CEO de YPF, Sergio Affronti, asumió la presidencia de la Red Argentina del Pacto Global para el periodo 2021, desde donde conducirá los destinos de la iniciativa de sostenibilidad en Argentina.
A través de un proceso de diálogo los participantes llegaron a un consenso para la elección de las nuevas autoridades con el objetivo de establecer un plan de trabajo bien concreto con los objetivos que se esperan alcanzar durante estos próximos dos años.
El Pacto Global de Naciones Unidas constituye un llamado a las empresas para alinear estrategias y operaciones con principios universales sobre derechos humanos, trabajo, medio ambiente y anticorrupción y para tomar acciones que promuevan objetivos sociales comunes.
