Por Marcelo Hirschfeldt (*)- El concepto de productividad resurge cada vez que se da un contexto de crisis, pero deberíamos tenerlo incorporado desde hace muchísimo tiempo. Lamentablemente es necesario que caigan los precios del barril de petróleo, como ha venido ocurriendo desde los últimos meses del año pasado y lo que va de 2015, para que la industria se replantee ciertas cosas.
Hablar de productividad es apuntar a sostener la producción, pero no a cualquier costo. Hay que poner en contexto la cuenca, porque si la comparamos con otros países nos damos cuenta que aquí no sólo es difícil aumentar la producción, sino que mantenerla ya es todo un desafío. Y dentro mismo de la región no es una situación homogénea. Por ejemplo, cuando se habla de incentivos para sostener la producción –o “aumentarla”- no debería perderse de vista que no es lo mismo la situación de PAE, que opera el mayor yacimiento del país en términos de producción y reservas, que pedirle a CAPSA o Enap Sipetrol que aumenten la producción, o incluso a YPF en varios de los yacimientos que opera en la cuenca.
Cuando se habla de productividad, se deben optimizar los costos de producción entre otras acciones y estos en los últimos años, se han elevado excesivamente. Los gremios del sector están hablando de aumentar la eficiencia de los equipos, o de reducir el ausentismo, lo que configura factores de importancia, pero no son los únicos. Se debe entender además que en los últimos años se ha incrementado el recurso humano para realizar iguales tareas que años atrás, lo cual agrega un factor más a la hora de hablar de los costos asociados a los servicios. No se trata de cuestionar mejoras gremiales que ha obtenido el sector del trabajo, lo cual ha sido un gran paso adelante para la calidad de las condiciones de trabajo; pero es el momento de replantear la situación, porque la actividad no puede seguir basada en un esquema en el que el 80% de los costos de producción de una operadora es en mano de obra. Cabe también resaltar que la eficiencia y mejor productividad no sólo debe ser responsabilidad de las empresas de servicios, sino también de las empresas operadoras de la región.
En la región nosotros producimos 92% de agua y sólo el resto de petróleo. Es decir que de cada 100 barriles extraídos, apenas 8 son de petróleo y la gran mayoría es agua, según el promedio de la cuenca. Hay que considerar que el 74% de las reservas probadas de Chubut (que a su vez representan el 44% del volumen total de reservas del país, estimado en 374 millones de metros cúbicos de petróleo) está en una sola concesión, de 2.400 pozos aproximadamente. En ésta se concentra alrededor del 30% de la producción total de la cuenca San Jorge, es decir Chubut y norte de Santa Cruz. Con esto quiero decir que hay concesiones más productivas que otras, que si bien la complejidad de explotación es la misma que en otras concesiones, la posibilidades de incremento de producción son más accesibles que en otras. El caso de CAPSA yacimiento Diadema, es un ejemplo excelente del manejo de agua, a costa de un trabajo muy duro, reduciendo el agua producida e inyectada pero manteniendo la producción de petróleo. Acciones que fueron necesarias para mantener la rentabilidad de la operación.
En resumen, no toda la cuenca está en condiciones de aumentar la producción, como a veces se exige desde el sector público. Debemos fijar el objetivo en sostenerla, lo que de por sí encierra un enorme desafío, ya que se requieren costos razonables. Para eso se necesitan empresas de servicios también eficientes, que puedan cumplir los trabajos en tiempo y forma, porque si no tenemos cultura de gestión de costos, podemos caer en extremos ridículos. Por ejemplo, hay empresas que cortan la compra de agua para tomar mate a sus empleados, pero por otro lado se van miles y millones de pesos en el uso inadecuado de los recursos e ineficiencia. Productividad es eso: aplicar la racionalidad de costos donde es necesaria. Debemos tener conciencia de que la cuenca es madura, de bajo rendimiento. Pensemos que hay yacimientos en México, por caso, que producen tres veces el volumen de petróleo de Argentina (unos 30 millones de metros cúbicos por año), con una cantidad de pozos similar a la de Diadema. Es el momento de analizar y resolver la racionalización, porque si mañana el barril vuelve a trepar a 100 dólares nos olvidamos todos, hasta acordarnos en la próxima crisis.
Racionalizar no implica despidos masivos, sino tomar conciencia de en qué escenario estamos. Hoy por ejemplo, cuando hablo con colegas de otros países, como Chile, me dicen que salvo Enap, el resto de las empresas extranjeras están echando gente y cortando inversión en equipos. Pasa lo mismo en Colombia, en Perú y en México. Nosotros estamos, por ahora, aislados de eso porque alguien está bancando el costo, pero es una fantasía. El sistema de subsidios y precios artificialmente altos de los combustibles no se puede sostener indefinidamente. Otra situación que se está dando, en operadoras y empresas de servicios, es que se están perdiendo las mejores prácticas y la gente con experiencia es cada vez menos. Pese a ello, hoy todavía tenemos roles de gestión o de ingeniería con experiencia necesaria para afrontar estos desafíos, creo que debemos pensar dónde estamos parados. Vale insistir: no todas las concesiones son iguales, algunas podrán asumir el desafío de aumentar la producción, pero para otras es directamente imposible. Es un esfuerzo similar a sacar agua a las piedras. Es natural que el gobierno busque mayor producción cuando plantea sus metas en la renegociación de contratos, o incluso fijar objetivos de exploración para buscar más reservas, porque no niego que pueda haberlas, pero primero se debe categorizar la complejidad, potencialidad y grado de madurez de los yacimientos y fijar metas de acuerdo a esas características. Se debe empezar a hablar de productividad en todas las líneas, porque sólo de ese modo podremos seguir en actividad durante mucho más tiempo.
(*) Ingeniero en Petróleo, consultor independiente de Oil Production Consulting www.opogc.com / Director de www.oilprodution.net
