Impulsan ley de salvataje a pymes regionales

Por Raúl Figueroa) Mientras los sindicatos evalúan los alcances y consecuencias de iniciar un conflicto que hoy podría ser funcional a la estrategia de operadoras y grandes empresas de servicio, en la parte final de una pulseada de varios meses, un silencioso proyecto que busca filtrarse en la agenda nacional apunta a que se establezca un salvataje a las pymes regionales, proponiendo que el Banco Nación compre la cartera de deudas de muchas de estas firmas y pueda refinanciar otorgando plazos y tasas más blandas.

La situación del golfo San Jorge y la crisis petrolera se aproxima a un aterrizaje forzoso, habida cuenta de que el cimbronazo actual por el rediseño de planes de trabajo de las operadoras es la primera etapa de un salto que volverá a sentirse en diciembre próximo, con la liberación plena del mercado y la fluctuación del precio internacional del barril en los yacimientos vernáculos.
Ante tal panorama, el sindicato petrolero Chubut busca atenuar el impacto en dos frentes: salvar el mayor número de puestos de trabajo posible, evitando que se siga engrosando el llamado “despido por goteo”, además de sostener el acuerdo salarial logrado tras una extensa negociación paritaria, pero cuyo pago del primer tramo de aumento de un 18% estaba sujeto a que antes se acordara la llamada “eficiencia productiva” en los yacimientos.
La baja de 14 equipos de YPF en Santa Cruz no tendría vuelta atrás, según reconocen los propios protagonistas del conflicto, por lo que se sumará a los 55 equipos que ya están inactivos en toda la cuenca, de los cuales 31 quedaron paralizados en Chubut, según reconoció Jorge Ávila días atrás, al efectuar un conteo de todas las operadoras, incluyendo a PAE, Tecpetrol y Enap Sipetrol. Con las grandes empresas de servicios especiales nucleadas en la CEOPE, cuyas casas matrices a nivel mundial no dudaron en achicar dotaciones en otras áreas del mundo (Schlumberger reconoció esta semana 16.000 despidos, en su informe trimestral a la Bolsa de Londres), para algunos analistas no es descabellado pensar que la estrategia empresaria hoy se puede ver favorecida por un conflicto de grandes proporciones.
En ese contexto, queda por salvaguardar la situación de empresas regionales que se encuentran en una delicada situación financiera, por lo que un proyecto de ley que buscaría impulsarse como un anexo a la ley pymes que aprobó recientemente el Congreso de la Nación, apunta desde Chubut a salvaguardar la situación de las pequeñas y medianas prestadoras de servicios petroleros, que por otro lado son el principal empleador de mano de obra en el sector petrolero.
Por eso se apunta a lograr una normativa que tendría el objetivo de refinanciar deudas, a través de una operatoria del Banco Nación para la compra de esas carteras, posibilitando que las empresas accedan a plazos de pago más extensos, además de una tasa de interés más acorde a la grave situación que atraviesa el sector.(Fuente: ADNSur).

Vaca Muerta poco viable con el barril a menos de 50 dólares

“Al ser el petróleo un commoditie, Argentina debe aceptar el precio que se determina a nivel internacional en lugares como Nueva York y Londres. Y lamentablemente en la actualidad esos valores se encuentran muy por debajo como para que nuestro país pueda producir y competir contra el resto del mundo a precios competitivos”, aseguró el economista experto en energía Francisco Mezzadri en diálogo con L.M.N.
Con respecto al megayacimiento de moda ubicado en la Cuenca Neuquina que comparten Neuquén, Río Negro y Mendoza, Mezzadri señaló: “Todos los últimos estudios que se han hecho sobre Vaca Muerta apuntan a que se requieren 15.000 millones de dólares de inversión por año para llevar a cabo una gran explotación en el lugar. Pero ni el sector privado ni tampoco el Estado argentino se encuentran en condiciones de invertir semejante cantidad de dinero con un precio mundial del petróleo tan bajo”.
Sin embargo, el especialista en energía consideró que el actual valor de los hidrocarburos a nivel global no debe ser un justificativo como para que semejante recurso natural no se aproveche al máximo. “Tenemos una riqueza enorme y fabulosa en Neuquén, con no una sino dos capas de shale. Explotarlo debe ser una política de Estado permanente, dando señales al mundo de que se puede hacer. Nadie se larga a explotar estos yacimientos a menos de 30 años, porque el de Vaca Muerta es uno de los cinco grandes yacimientos del mundo en su tipo. Algo que da para mucho más que la autosuficiencia que desde hace muchos años se pregona en Argentina”, señala Mezzadri. (Fuente: La Mañana de Neuquén).

El Shale oil de Estados Unidos se puede recuperar a 60 dólares por barril

Las reservas norteamericanas de shale son la opción más barata de producción petrolera futura y probablemente atraigan más inversión que los proyectos rivales como los yacimientos en aguas profundas, según un importante asesor del sector. Cerca del 60% de la producción petrolera viable, desde el punto de vista económico, a un precio del crudo de u$s 60 el barril es en shale norteamericano y sólo cerca del 20% es en aguas profundas, según la consultora Wood Mackenzie.

Las compañías con activos en shale estadounidense probablemente tengan una ventaja competitiva en los próximos años. Los productores que dependen de los yacimientos petrolíferos ubicados en regiones de mayores costos como el Mar del Norte y aguas profundas a la altura de la costa occidental de África tendrán que reducir costos o enfrentarán una menor producción.

Después del derrumbe del precio del petróleo que comenzó hace dos años, los costos de producción bajaron en toda la industria, pero disminuyeron mucho más en el shale norteamericano que en otros tipos de proyectos.
Los costos promedio por barril cayeron entre 30% y 40% en los pozos de shale estadounidenses, pero apenas entre 10% y 12% en otros proyectos petroleros, señaló Simon Flowers de Wood Mackenzie.
Las regiones estadounidenses que tienen reservas de shale hace dos años se ubicaban en el medio de la curva de costos para el futuro abastecimiento de crudo, y ahora se encuentran casi en el extremo más bajo.
Las inversiones en la formación de shale Eagle Ford al sur de Texas en promedio necesitaban un crudo Brent de u$s 48 para alcanzar el punto de equilibrio, según cálculos de Wood Mackenzie, mientras que los proyectos en la formación Wolfcamp en la Cuenca de Permian al oeste de Texas requieren un petróleo de apenas u$s 39.
“Hay más oportunidades para invertir en Estados Unidos, y es ahí donde estará la inversión”, dijo Flowers. (Fuente: El Inversor Energético y Minero).

 

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *